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viernes, 10 de abril de 2020

[Crítica] 'Holland Road Massacre: The Legand of Pigman' - Emir Skalonja, 2020


-DIRECTOR: Emir Skalonja
-GUIÓN: Emir Skalonja
-REPARTO: Heather Dunham, Kristina Santiago, Michael Balch, Robert A. Coldicott, Jaco Hodgson, Jeff Larivey, Al Baker, Jesse Huntz, Cryss Marie y Kimber Lee
-FX: Krystal Shenk
-MÚSICA: Gra, Jim Crean
-AÑO: 2020
-PAÍS: EEUU
-PRODUCTORA: FoxTrot Productions



Una leyenda urbana cobra vida a través de un asesino enmascarado que se hace llamar Pigman, haciendo honor a su máscara de cerdo ensangrentada. Él se oculta en los bosques nevados de Holland Road, y tras sus huellas en la nieve se van acumulando numerosos cuerpos mutilados.

Holland Road Massacre: The Legand of Pigman es un ejemplo de cine indie realizado con más corazón que recursos, hecho por fans del género y que se dirige también a los fans del terror más thrash. Este es un público menos exigente en aspectos técnicos y de interpretación, pero que sí exige que se compensen las limitaciones de presupuesto con otro tipo de gadgets, como puede ser un ritmo estable y creciente, con escenas de violencia que merezcan ser recordadas o un asesino con el suficiente carisma para que se le otorgue personalidad a la película, entre otras cosas. Pensamos que Holland Road Massacre: The Legand of Pigman cumple con estos elementos básicos, por lo que sus cortos 75 minutos se pueden disfrutar sin mirar el reloj.

La historia se sitúa en un ambiente frio y con poca gente en las calles. El escenario es ideal para este slasher, y en él se dejan ver diferentes personajes con diferentes registros que aportan variadas lineas argumentales dentro de la trama principal, acabándose todas por unificar en el tramo final. Las interpretaciones rozan lo amateur, pero cumplen. Destaca Heather Dunham interpretando el papel de Lauren, que es la final girl de la película (con empoderamiento femenino incluido al final de la película).


Ese tramo final es brutal, sangriento y sin duda gustará a los fans del horror más desprejuiciado. Un duelo final en que Pigman, vestido con su traje militar y su máscara de cerdo ensangrentada, empuñando su hacha no tiene piedad de nadie. No habla, solo actúa, como si de un nuevo Jason Voorhees se tratara. Y a esto, la música de la banda de metal extremo Gra, ameniza las carreras y los gritos con sus temas, aportando intensidad y sensación de violencia en el ambiente. Un final bastante logrado.

Holland Road Massacre: The Legand of Pigman es un entretenimiento indie que está realizada por un fan del género de terror como es Emir Skalonja. La fórmula que emplea no es novedosa, ni ostentosa y ni tampoco un ejemplo de buena cinematografía, pero ofrece un entretenimiento de consumo rápido con algunos de esos detalles que suelen gustar a los que devoran cine de terror.

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